Este singular itinerario recorre uno de los rincones que rodean el conjunto kárstico del Paramo de la Lora. Lugar de pastores, guerras y culturas ancestrales, donde su paso nos ha dejado una huella imborrable en cada una de sus rocas.
El nacimiento del Rio Ivia como confluencia de las aguas que este macizo calizo recoge a los largo de toda una vida, rocas con vida, y paisajes lunares, dignos de conocer.
A lo largo del tiempo el agua ha ido disolviendo las calizas de este paramo, horadandolas y filtrandose hasta formar un sistema de cauces, galerias subterraneas y cuevas; estas formaciones se conocer como Karst. y dan lugar a diferentes formas que podremos decubrir a lo largo de este itinerario ( dolinas, torcas, etc....).
Las cascadas que veremos y que dan origen al rio que da nombre a este valle, Ivia, es una surgencia de la que brotan las aguas del interior del Paramo de la Lora.
El agua que brota del interior arrastra carbonato calcico disuelto. Cuando sale al exterior, la caliza se precipita y se mezcla con material vegetal, formando una roca llamada "TOBA", muy utilizada en las construcciones de casas en las localidades cercanas al Páramo de la Lora en todo Valderredible.
Remontado el pequeño valle llegaremos al paramos pudiendo observar un antigua cabaña de pastores, protegido de los rigurosos vientos existentes, cuya cobertura seguramente estuviese hecha con vegetales ya que no tiene restos de losas de piedra. Desde lo alto la vista de la montaña palentina y el yacimiento cantabro de Monte Bernorio, datado entre los siglos IV a III a.c, es impresionante.
A lo largo del tiempo el agua ha ido disolviendo las calizas de este paramo, horadandolas y filtrandose hasta formar un sistema de cauces, galerias subterraneas y cuevas; estas formaciones se conocer como Karst. y dan lugar a diferentes formas que podremos decubrir a lo largo de este itinerario ( dolinas, torcas, etc....).
Las cascadas que veremos y que dan origen al rio que da nombre a este valle, Ivia, es una surgencia de la que brotan las aguas del interior del Paramo de la Lora.
El agua que brota del interior arrastra carbonato calcico disuelto. Cuando sale al exterior, la caliza se precipita y se mezcla con material vegetal, formando una roca llamada "TOBA", muy utilizada en las construcciones de casas en las localidades cercanas al Páramo de la Lora en todo Valderredible.
Remontado el pequeño valle llegaremos al paramos pudiendo observar un antigua cabaña de pastores, protegido de los rigurosos vientos existentes, cuya cobertura seguramente estuviese hecha con vegetales ya que no tiene restos de losas de piedra. Desde lo alto la vista de la montaña palentina y el yacimiento cantabro de Monte Bernorio, datado entre los siglos IV a III a.c, es impresionante.
Esta zona recibió la denominación de Reserva Geológica de las Loras. Con este itinerario realizaremos un primer contacto con este mágico lugar lleno de secretos ancestrales, usos, costumbres y tradiciones.
Animate a descubrirlo con nosotros o por tu cuenta, en cualquiera de los casos si te apetece comer estupendamente en un ambiente agradable no dejes de visitar Casa Florencio donde Laly y Francisco os atenderan con cariño y dedicación.
Animate a descubrirlo con nosotros o por tu cuenta, en cualquiera de los casos si te apetece comer estupendamente en un ambiente agradable no dejes de visitar Casa Florencio donde Laly y Francisco os atenderan con cariño y dedicación.