sábado, 9 de marzo de 2013

LENGUA DE SIGNOS EN LOS COLEGIOS



Caminando hacia el bilingüismo no es un reclamo para aprender inglés, francés, alemán o cualquier otro idioma. Es una apuesta por integrar y tomar de la mano en el proceso educativo a aquellos niños y niñas que presentan una deficiencia auditiva. Lograr que se integren con el resto de compañeros del colegio, que sigan la dinámica de las clases en aulas normales, evitando que se queden rezagados separados de los demás alumnos en aulas de apoyo, llamadas "aulas de hipo-acústicos".
Además, en este camino los beneficio no son sólo para los escolares sordos, porque el resto también se beneficia, acostumbrándose ya en los primeros años de vida a convivir con personas con minusvalías  adquiriendo sensibilidad hacia ellos y aprendiendo incluso la lengua de signos, al verla usar a los profesores.


Además de las clases el resto de actividades del centro también están adaptadas a estos menores con déficit auditivo. El proyecto planifica talleres de habilidades sociales para que niños sordos y oyentes interactúen de la mejor forma: jugando juntos.
Muchos niños de infantil están aprendiendo lengua de signos al ver a los profesores y a la gente que les rodea.
Los niños y niñas sordas reciben así una gran estimulación en el lenguaje. Ese avance es seguido por sus propios compañeros  que avisan con alegría al profesor si el menor aprende a pronunciar una palabra, nos cuentan algunos profesores que desde hace muchos años llevan a cabo este proyecto.
Las edades de los escolares con problema de audición es muy variada en las edades.
Hay diferentes tipos de pérdida auditiva y en función de eso al adquisición del lenguaje será de una manera u otra. si la perdida es moderada, con ayuda del audífono de ciertas adaptaciones en la clase, estos niños pueden seguir el ritmo del aula, pero si la sordera es profunda, aunque se apoye con el audífono  es preciso el lenguaje de signos para entender la explicaciones del profesor, porque el alumno/a al no oír nada no puede reproducir ningún tipo de sonido.
Colegios como el Elíseo Godo y trabaja en proyectos de bilingüismo introduciendo la lengua de signos como segundo idioma.
Favoreciendo además de la integración de alumnos/as con problemas auditivos, el resto y valoración por parte de los niños y niñas oyentes, creando menos diferencias entre ellos, conviviendo y compartiendo problemáticas y momentos.
Una experiencia que todos los centros escolares deberían de llevar a cabo o con proyectos como este, o con sencillos talleres de iniciación a la lengua de Signos para toda la comunidad.